emilie autumn

emilie autumn
opheliac

jueves, 12 de noviembre de 2009

madito jardinero! (primera historia)


Nunca me imagine hasta que punto llegaría mi furia, siempre me vi como alguien pasivo, por lo menos eso pensaba de mi la gente de esta mansión.
Pero al momento de las sospechas. Todos desconfiaron de todos, diciéndome a mi mismo que este lugar nunca volvería a ser como antes, ¡pero claro! Eso ami no me afectaba porque soy la persona de la que menos sospechan, por supuesto y con respecto a los criados, ¡odio a esa maldita chillona! Que tenía demasiada confianza con mi esposa. Pero eso no la cubre de sospechas y seria mi labor deshacerme de ella con mi facilidad de convencer a las personas, de seguro la ley me creería.
En mis momentos de meditación, meditación dolorosa y a la ves meditación cínica, escuche el grito de la cocinera, ordenándome que bajara.
En ese momento puse la cara de tristeza más convincente que puedo lograr y seguí sus ordenes.
Al bajar me encontré frente al cuerpo, que parecía solo un saco bañado en sangre, posado boca arriba con un pedaso de género sobre su cara, cubriendo la mirada de dolor. Al observarlo, un aire de estremecimiento me rodeo, pero me preguntaba como pudieron encontrarlo si el escondite, era el mejor de este lugar… un closet que nunca se abrió! Como si el cuerpo estuviera encarcelado y que de hecho iba a arrojar mañana a la basura para que nunca lograran encontrar mi cruel y dulce acto cometido con placer y dolor. Al mirar el cadáver con mis lágrimas falseadas se me acerco un investigador con las típicas y poco ingeniosas preguntas de siempre.
INVESTIGADOR:(con ojos de odio y seguridad)¿donde estuviste a la hora del caso?
YO: (lo mire con cara de entre seguridad y dolor de la perdida) trabajando ¡hay pruebas! Pregunte a cualquiera del lugar, todos me vieron salir.
En ese momento se me acerco la chillona con su mirada rebosante de dolor, ojos llorosos como cascadas, a abrasarme y compadecerme y por supuesto seguí su juego
Volví a mirar a la difunta, ahí posada con la gente enrabiada alrededor y note mi seguridad. Tenia muy pensado mi discurso frente a los tribunales y nada me detendría ami y a mi libertad.
Mientras me rebosaba en mis logros, vi entrar al jardinero con un oficial, por supuesto no me preocupe para nada, hasta que comencé a escuchar su conversación por mera curiosidad y me horrorice al escuchar sus palabras.
JARDINERO: (exaltado) ¡si lo vi todo!
OFICIAL: (tratando de tranquilizarlo) dime que viste
JARDINERO: vi cuando el marido se devolvió del camino al trabajo, vi cuando con odio empujo la puerta, vi cuando tomo el hacha con sed de sangre y entro al cuarto de la esposa mientras ella dormía placidamente y de eso solo escuche un grito y todo terminaba
OFICIAL: y como nadie se dio cuenta?
JARDINERO: porque fue a la hora del descanso
Al ver que todos escucharon la historia, me detuve a pensar ¡mi final esta cerca!...

No hay comentarios:

Publicar un comentario