Ángeles y cuchillos

Ángela estaba sentada en su sofá leyendo un libro de HP Lovecraft a la luz de una vela, luego escucho que tocaron a su puerta, así que fue a abrir. Se asomó por la ventana primero, era ese molesto chico de Brian ¿porque estaba allí perturbando su paz?

Decidió abrir y preguntarle que quería, pero justo cuando la puerta se abrió completamente Ángela sintió como una cubeta llena de un extraño líquido caía sobre su cabeza, dejándola cubierta de esa mezcla anormal.

A su alrededor escuchó numerosas risas, fue entonces cuando se dio cuenta de que Brian no había venido solo, si no que trajo a su ejército de compañeros no-pensantes para que, una vez más, se rieran de sus bromas de mal gusto.

¿Por qué ella? ¿Por qué siempre era a ella a la que le hacía esas tan odiosas bromas? Desde que se conocieron parecía que Brian había sido creado para molestar a Ángela pero esta vez fue el colmo. Luego de 6 años desde que se conocieron el primer año de secundaria, Ángela decidió materializar lo que tantas veces había soñado. Entró nuevamente a su morada, se dirigió a la cocina y tomó un cuchillo. Mina, así llamaba a su cuchillo favorito, era mediano, afilado y con una punta que atravesaría un chaleco antibalas, mango de madera, con la inicial A tallada a mano en el extremo de este.

Brian seguía ahí, no podía parar de reír, y su sequito también continuaba parado cerca de él, burlándose con sus risas despreciables. Ángela salió, nadie le dio mucha importancia hasta que, cegada por el odio, empuñó su cuchillo y, desde abajo, se lo enterró a Brian. Él comenzó a escupir sangre, ella lo desgarró aún más mientras veía a su enemigo caer.

Lo dejó ahí, en el suelo, desangrándose, mientras volteaba a mirar a los otros. Todos los presentes quedaron en shock mientras veían cómo Ángela mataba a Brian, luego huyeron al ver en sus ojos las llamas del mismísimo infierno. Es por eso que dicen que hay que cuidarse de las personas tranquilas, ya que suelen ser las más peligrosas.

Ángela fue denunciada a la policía, 2 días después llegaron a su casa para llevarla al manicomio, pero ella no se encontraba, no saben a donde fue, tampoco hallaron el cuerpo, solo dejó en la sala un cuchillo ensangrentado y su libro. Ella conocía las consecuencias de sus actos, por eso no se había atrevido a hacerlo hasta este momento, pero después de realizado solamente debes de cuidar que no te atrapen.

~Gina~