emilie autumn

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opheliac

lunes, 5 de marzo de 2012


El internado

Parte 3

UN NUEVO PLAN

Los hombres de bata blanca llegaron por sorpresa, me tomaron y me pusieron una camisa de fuerza. ¿Adivinan a dónde me llevan? Sí, al manicomio, pero ¿Por qué? ¿Piromanía? ¿Homicidio? Yo no hice nada. Unos días después llegó mi compañero de celda, era Charles, no me sorprendió en lo más mínimo.

Estuvimos horas callados, mirándonos mutuamente, me pareció eterno, él fue el primero en hablar:

-Escucha, se que te metí en problemas por esto, pero de verdad lo siento y si me permites tengo un plan-
-¿Plan? Oh no, ya estuvo bueno de tus planes, estoy aquí por tu culpa y no te haré caso-
-Vamos, es bueno y quiero enmendar lo que hice-
-Ni lo pienses, ¿Imaginas lo que dirán mis padres cuando se enteren de esto? Si te sigo sólo terminará peor-
-Ok, comprendo, solo te pido que lo consideres, porque yo me iré con o sin ti-

Esa noche la idea no dejaba de darme vueltas en la cabeza, digo…quizá funcionaría esta vez. Oh, pero ¿Qué estaba pensando? Por supuesto que no. Sin embargo la frase “me iré con o sin ti” me inquietaba, además conocer el plan no significaba tener que seguirlo ¿O sí? Sin mencionar que la única razón por la que el plan anterior de Charles no había funcionado era por mi pésima actuación.

A la mañana siguiente le pregunté a Charles en qué consistía su “fabuloso nuevo plan”, pero le advertí que no era seguro que lo seguiría. El accedió a contarme:

“He estado investigando desde que llegué por un punto ciego a la cámara de vigilancia, lo encontré: el baño, o lo que se supone es el baño. La pared queda de frente con una malla que hay que escalar, la cámara de esa parte tiene el punto ciego justo en las paredes, hay que ir con cuidado sin despegar la espalda de la pared. En cuanto a la parte superior de la malla solo hay que pasar con mucho cuidado en una buena sábana para que no te rasguen los alambres. Después de escapar solo tenemos que meternos a una coladera e ir a casa ¿Qué opinas?”

No sé por qué, pero ese tono que usa al contar sus planes te convence de que realmente funcionarán a la perfección, además de que los cuenta con tanto detalle que te hace creer que tiene todo calculado

-Creo que podría funcionar, solo ¿Cómo vamos a abrir la pared?-
-He estado coleccionando mis cucharas del almuerzo desde que llegamos-
-Entonces manos a la obra-

ESCAPAR

Tardamos 2 meses, más o menos, en poder abrir un agujero decente en la pared, los restos de polvo eran tirados al excusado. Terminamos nuestra vía de escape y, en la noche, pusimos en marcha la segunda etapa del plan. Tomamos las sábanas de nuestras camas, salimos por el agujero y caminamos cuidadosamente sin despegarnos de la pared. Al llegar a la malla escalamos haciendo la menor cantidad de ruido posible. Cuando subimos a la parte más alta coloqué escrupulosamente la sábana en una de las partes con púas y logré salir ileso, Charles hizo lo mismo.

Comenzamos a escuchar voces de policías y vimos luces que parecían proceder de lámparas, corrimos en zigzag tratando de evitar que nos iluminara hasta encontrar la coladera más cercana donde nos metimos logrando un escape casi perfecto.

VIDA INMUNDA

Caminamos durante varios días, soportando olores asquerosos y sin nada que comer más que lo que podíamos llegar a robarnos saliendo unos breves instantes de las alcantarillas. La verdad es que nos hubiera gustado quedarnos afuera y vivir como ladrones, pero nuestra condición de “Locos esquizofrénicos buscados en todo el país” nos lo impedía.

Sin embargo todo se vino abajo cuando, una noche, mientras intentábamos dormir escuchamos chillidos, no de persona, de animales, lo cual era bastante común en una coladera. El ruido comenzó a hacerse más fuerte, luego comenzamos a sentir pequeñas patas en todo el cuerpo y…

2 MUERTES MÁS

Era una mañana como cualquier otra, la señora Ágata paseaba por el río cercano al parque público. Divisó un extraño bulto que sobresalía moviéndose, no le dio mucha importancia, pero poco a poco el bulto fue girando y tomando la forma de una cabeza humana, la señora gritó de horror y llamó a la policía.

Al sacar tanto el cráneo como el resto del cuerpo y llevarlo a un laboratorio, le hicieron estudios que probaron que era de Tomas, o que alguna vez lo había sido. Se hallaron marcas de dientes y mordidas en todo su cuerpo, no tenía ojos y su cerebro parecía haber sido “rascado”. ¿Qué le había ocurrido? Al parecer una noche mientras dormía en la coladera unas ratas olieron los restos de alimento en su boca, atraídos por el hedor devoraron vivo a Tomas, dejando solo el cabello, uno que otro órgano, trozos de piel y, obviamente los huesos.


~Gina~

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